Uno de los cuadro más famosos del museo del Prado
Hoy vamos a interpretar uno de los cuadros más famosos y admirados del museo del Prado, estamos hablando del Jardín de las Delicias de El Bosco.
Muchos han conectado con esta obra por todos los misterios que se ocultan en él, pero otros muchos no han conseguido descifrar su encanto.
Esta vez os daremos unas claves para ayudarte a sintonizar con el cuadro, ¿listos?
Claves
El tríptico cerrado representa el tercer día de la creación, se puede ver una gama predominante de color en blanco y negro, ya que en este día no existía la luz. En el centro está representada la tierra con una esfera y al lado izquierdo superior está Dios.

Al abrir el tríptico vemos tres láminas completamente diferentes:
El lado izquierdo representa el paraíso, se observa a Dios representado por Jesús con Adam y Eva que, según la Biblia, fueron los primeros humanos terrenales. Muy cerca de ellos se encuentra el drago, este árbol representa la vida. Además, en esta lámina se encuentra la fuente de la vida.

En la representación central vemos tanto a personas solitarias como en grupos o acompañados de animales. De esta ilustración sale el nombre del cuadro, el Jardín de las Delicias. El mundo está entregado al pecado y a los placeres de la vida. Una de las representaciones más claras dentro de esta lámina es la lujuria y las escenas con especial carga erótica.
En la parte central El Bosco representa a mujeres jóvenes desnudas que nos recuerdan a la Venus del Mar, éstas representan del deseo. Los hombres desnudos montados en animales fantásticos simbolizan la sin razón de este mundo que se rige por el placer.

En el lateral derecho se representa el infierno, pero este infierno es el más impresionante que ha ilustrado el artista. Aparecen instrumentos que se emplean para torturar a los pecadores que han malgastado su tiempo en música profana. También en este infierno vemos la representación de los siete pecados capitales y podemos deducir por el tamaño y la importancia que tiene sobre la lámina que el hombre-árbol está representando al demonio.

Esperamos que estas claves os ayuden a contemplar con otra perspectiva este cuadro.