Leyendas de Madrid II- Calle de la Cabeza
Siguiendo la serie de misterios de Madrid os vamos a contar la macabra leyenda que se oculta detrás de la Calle de la Cabeza…
¡Comenzamos!
Esta leyenda del siglo XVI tiene como protagonista a un sacerdote que poseía riquezas y a su envidioso sirviente portugués.
El sirviente, ahogado por las deudas contraídas durante años y ciego de envidia por las riquezas del sacerdote, planeó matarlo y así lo hizo una noche.
El sirviente asesinó al sacerdote cuando estaba desprevenido y le cortó la cabeza, cogió todos los objetos de valor de la casa y huyó a Portugal para no ser capturado. Cuando se descubrió el crimen, la identidad del asesino y los sucesos se volvieron el cotilleo de moda de Madrid. Pero poco a poco y con el paso del tiempo este crimen se archivó sin resolver y se fue olvidando…
Después de algunos años un próspero caballero apareció en Madrid, este caballero era el sirviente que había vuelto a la capital.
Una nueva vida
Comenzando su nueva vida y paseando por el Rastro decidió darse un capricho y comprarse una cabeza de carnero para darse un festín. Envolvió la cabeza en un paño, la guardó debajo de su capa y se dirigió de vuelta a casa.
Un vigilante, que había observado el camino de las gotas de sangre que procedían de la capa de nuestro protagonista se acercó y le preguntó por lo que llevaba debajo de ésta. El antiguo sirviente respondió con sinceridad y le contó que era la cabeza de un carnero que se había comprado…
Sospechando de él, el policía le pidió que le enseñará lo que ocultaba y sin ningún problema el caballero se lo enseñó. Cuando quitó el paño el ex-sirviente se quedó horrorizado… Lo que llevaba era la cabeza del sacerdote asesinado.
Inmediatamente fue esposado y detenido y sentenciado a ser colgado en la Plaza Mayor tras reconocer el asesinato.
Una vez realizada la ejecución, la cabeza del sacerdote volvió a convertirse en la de un carnero…
Desde entonces, la calle donde fue descubierto el asesinato comenzó a ser llamada: “Calle de la Cabeza”.
Escalofriante, ¿verdad? Cuando pases por esta calle fíjate en que en el letrero de la calle aparece: un cuchillo, la cabeza cortada y la cabeza de un carnero en honor a esta leyenda.